Forrajes para el verano.
Foto: CONtexto Ganadero.

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4 soluciones para tener pastos durante el verano

Por - 05 de Agosto 2014

Rastrojos, cercas vivas, heno y silo, son algunas alternativas que usted, amigo ganadero, puede usar en su predio para no sufrir desabastecimiento de forrajes durante el fenómeno de El Niño.


Rastrojos, cercas vivas, heno y silo, son algunas alternativas que usted, amigo ganadero, puede usar en su predio para no sufrir desabastecimiento de forrajes durante el fenómeno de El Niño.

En épocas críticas de verano, como la que padece Colombia por estos días, es importante que los productores ganaderos ejecuten en sus predios diferentes estrategias para lograr conservar forrajes de buena calidad para alimentar a sus semovientes.

CONtexto Ganadero le da 4 claves para que su explotación bovina siempre cuente con los pastos necesarios para la alimentación de los animales, sin importar que su región esté en épocas de verano o invierno. (Lea: Suplementación del ganado en veranos extremos)

La Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, realizó las dos primeras recomendaciones, las cuales están orientadas a encausar un cambio de cultura hacia la prevención, de una parte, pero también hacia la optimización de los mínimos recursos disponibles para alimentación del hato durante temporadas climáticas adversas.

1) Manejar el rastrojo: La formación y crecimiento del rastrojo es una condición natural de las especies que, con el paso del tiempo, se han adaptado a estados que les favorecen (lluvias) y que les son adversos (veranos prolongados). (Lea: Diversificar forrajes, clave para mejorar la nutrición bovina)

2) Utilizar cercas vivas: De un kilómetro de cerca viva, árboles con características forrajeras, se puede obtener una tonelada de forraje seco, el cual puede ser ofrecido en el potrero con el propósito de disminuir los costos de la suplementación.

Por su parte, Javier Sarmiento, gerente de distrito de Semillas Colombia, Impulsemillas, dio 2 claves desde su concepto para que los productores conserven sus forrajes y cuenten con ellos en las épocas de verano.

3) Hacer henificación: este proceso, que convierte el forraje verde en pasto seco para que pueda ser conservado durante largo tiempo y ofrecido a los animales en el momento de escasez.

4) Ensilado: Con la conservación del forraje, principalmente con alimentos como el plátano, la yuca, la avena y los cítricos, se mantiene estable la composición del pasto durante largo tiempo, con la meta de poseer alimento para los semovientes. (Lea: Avenas forrajeras, alternativa nutritiva en trópico alto)

De esta forma, los ganaderos que poseen aún pastos en sus predios pueden aplicar alguna de estas claves para que en los meses venideros, cuando se esperan temperaturas aún más altas, cuenten con reservas para sus animales y su rentabilidad no se vea afectada.