Buenas Prácticas Ganaderas mejoran las relaciones con los trabajadores

La adopción de buenas prácticas ganaderas (BPG) en producción de leche implica cambios en las condiciones laborales de los empleados, las interrelaciones y la capacitación del personal.

De acuerdo un trabajo desarrollado en 2019 por Brayian Cuartas Martínez, Dursun Barrios y Mario Fernando Cerón-Muñoz, del Grupo de Investigación GaMMA, de la facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Antioquia,.la certificación de BPG también mejora su imagen ante productores y empresas compradoras de leche. (Lea: Lea el decálogo de las BPG)

Más del 80 % de los agricultores que participaron en la investigación eran mayores de 30 años, con alto nivel de madurez, reflejado en la decisión aprender haciendo sin que eso afecte los procesos agrícolas. En cuanto a la escolarización, cerca del 30 % de los productores obtuvieron títulos de pregrado y posgrado. Esto, señala la investigación, implica que la adopción de las prácticas en la producción de leche tiene una relación positiva con edad y nivel de educación.

Los productores son propietarios de granjas lecheras, la mayoría de los cuales también realizan funciones de gestión, lo que implica que sus decisiones son motivadas por la productividad y el interés personal, dice el trabajo. (Lea: ICA establece resolución para la certificación de BPG en producción de leche)

Los productores señalaron que la certificación en BPG les permitió desarrollar nuevas habilidades y adquirir nuevos conocimientos. Enfatizaron que estaban felices de alcanzar los objetivos propuestos, que indica un sentido de pertenencia.

La evaluación del proceso de certificación con respecto a la facilidad de cumplir con los requisitos, la gestión de registros y la capacitación de los empleados fueron catalogados como los aspectos más difíciles de cumplir. Las otras variables fueron fáciles de cumplir. (Lea: Piden mayor capacitación en BPG como paso previo a exportar a EE.UU.)

El énfasis, dicen los investigadores, debe ser colocado en la importancia de la observación y la recopilación de datos para realizar análisis productivos y de gestión basados sobre información real que permita tomar decisiones acertadas.

De igual manera el trabajo reveló que los productores tienen la intención de volver a certificarse en BPG. El 97 % de los propietarios consideraron que la satisfacción generada por los cambios en la granja logrados debe ser preservado y que la recertificación les permitiría cumplir con la norma mientras obtienen los beneficios que la misma ofrece. (Lea: Cada vez más predios del país implementan las BPG)

La aplicación y el cumplimiento de las Buenas Prácticas implican que los productores tienen que invertir tiempo y dinero en el proceso de certificación. A cambio, esperan resultados satisfactorios. Mientras que un buen pago por litro de leche producida bajo un modelo de producción limpia es importante, no es lo decisivo para aplicar las BPG.

Los productores quedaron satisfechos con los cambios generados en la finca, tanto en administración como en gestión de prácticas, resultantes de la aplicación de las BPG.

Así mismo, como resultado de la aplicación de la tecnología, se sintieron más satisfechos con su trabajo diario y su vida personal, que fue favorecida por un ahorro de tiempo. (Lea: Un ejemplo de buenas prácticas de ganadería intensiva especializada en lechería)

Según los resultados del trabajo, es más probable que un productor adopte las Buenas Prácticas Ganaderas si la institución a cargo del desarrollo del programa ofrece pautas para la aplicación e implementación de tales modelos y los requisitos son fáciles de adoptar y aplicar.

Algunos productores señalaron que potenciales cuellos de botella para la certificación son la escasez de personal del ICA responsable de auditar las granjas y las diferencias de criterios entre fincas, asesores técnicos y el personal de ICA.