ganado en pastoreo
Foto: daysoftheyear.com

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Atacar la producción de carne de res no salvará la Tierra

Por - 30 de Agosto 2022

Los países desarrollados están implementando prácticas de ganadería sostenible a las que estamos acostumbrados como pastoreo en lugar de estabulación. Sin embargo, surgen detractores que incluso critican esa forma de producción e insisten en criticar la ganadería bajo cualquier sistema.


Los países desarrollados están implementando prácticas de ganadería sostenible a las que estamos acostumbrados como pastoreo en lugar de estabulación. Sin embargo, surgen detractores que incluso critican esa forma de producción e insisten en criticar la ganadería bajo cualquier sistema.

Representantes de la industria en The Guardian respondieron a un artículo del periodista y columnista George Monbiot que calificó la producción orgánica de carne de res y cordero bajo el sistema de pastoreo como “los productos más dañinos”.

A juicio de los autores, todavía hay interrogantes que se deben responder sobre el sistema alimentario globalizado, pero la “demonización” de la producción orgánica de carne de bovino alimentado con pasto como lo hizo Monbiot no es la solución.

De hecho, incurre en la premisa equivocada de “tener un conocimiento definitivo de ‘la ciencia’” y aliena a otros en “la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad”. (Lea: En EE. UU. todavía discuten ventajas de carne alimentada con pasto)

En su nuevo libro, Regenesis, Mendiot argumentó que la carne de res y cordero alimentados con pasto son los productos agropecuarios más dañinos, porque ocupan alrededor del 26 % de la tierra en todo el planeta para pastoreo pero solo producen solo el 1 % de las proteínas. De hecho, este columnista lleva años atacando a la ganadería sin reconocer otros estudios que contradicensu posición

También criticó a los productores que afirman que sus sistemas de pastoreo “imitan la naturaleza”. Una revisión de la evidencia de más de 100 estudios encontró que cuando el ganado se retira de la tierra, aumenta la abundancia y diversidad de casi todos los grupos de animales salvajes.

“Donde hay ganado, hay menos mamíferos salvajes, aves, reptiles e insectos en la tierra, y menos peces en los ríos. Quizás lo más importante, debido a su papel crucial en la regulación de los sistemas vivos, es que tiende a no haber grandes depredadores”, dijo.

Sin embargo, el periodista no tuvo en cuenta que hay numerosos estudiosos que indican que sí es posible regenerar con ganadería, como lo han demostrado Allan Savory en Zimbabue, Johann Zietsman en Sudáfrica, Daniel Suárez en México o diversos ganaderos en Colombia.

Uno de ellos es Román Jiménez Aristizábal, médico veterinario zootecnista y propietario de la Hacienda El Pajuil, quien logró conservar en su finca flora y fauna nativas, incluso depredadores, junto con un sistema de producción ganadera con ganado vacuno.

“No quiere decir que no me ataquen los animales, pero sí que disminuya. Esto consiste en aprender a vivir con la naturaleza, pues nosotros somos visitantes de estos terrenos. Los animales son realmente los habitantes de esas zonas”, reveló en una entrevista a CONtexto ganadero.

Volviendo con la crítica a Mandiot, los representantes sostienen que contradice las experiencias y estudios de productores que han visto las ventajas de mantener el ganado en sistemas sostenibles de pastoreo. (Lea: ¿Sus vacas se alimentan a pasto? Ahora va a poder certificar su producción)

Hay riesgos en menoscabar a los agricultores que están trabajando arduamente para terminar con la dependencia de las prácticas dependientes de los combustibles fósiles, secuestrar carbono, restaurar la naturaleza y demostrar una alternativa al actual sistema globalizado.

También se ataca al movimiento agroecológico, al descartar el importante papel que debe desempeñar el ganado en la seguridad nutricional, las rotaciones de fertilidad, el pastoreo de conservación y los medios de vida de los pequeños ganaderos y agricultores.

Polarizar y simplificar estos debates vitales distrae y no ayuda. Animar a los ciudadanos a rechazar los sistemas agrícolas verdaderamente sostenibles corre el riesgo de aumentar la reacción violenta contra la acción seria sobre las crisis climática y natural.

La agricultura puede ser una fuerza de cambio, con un enorme potencial para generar resiliencia y seguridad en nuestro sistema alimentario, remataron los autores. (Informe: Mercado de carne de res alimentada con pasto crecerá en los próximos años)

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