Arranca construcción del Frigorífico Ecotunja cuyo costo será de $60.000 millones

Será una planta de transformación con estándares internacionales que generará empleo y desarrollo e incluso cambios de cultura en la comercialización de ganado, pues contará con un imponente centro de subasta de animales.

La planta de sacrificio de la ciudad de Tunja –capital del departamento de Boyacá– que llevará por nombre Frigorífico Ecotunja S.A.S. comenzará a construirse en breve tiempo pues sus ejecutores ya cuentan con los respectivos permisos, estudios de viabilidad y hasta con los diseños definitivos.

De acuerdo con lo planeado la planta transformadora de alta tecnología iniciaría su funcionamiento en marzo de 2020, pero los complejos tramites que requiere un proyecto de esta naturaleza, aplazaron dicha meta einiciará operaciones en el 2021.

Posteriormente vino el tema de la emergencia sanitaria con la pandemia de la COVID 19 que obligó a otros tiempos adicionales. “Debido a la situación del país con esta pandemia paramos un poco, pero ya estamos retomando el tema y organizando para avanzar. Esperamos arrancar a construir muy pronto”, sostuvo Armando Contreras, gerente de la empresa Frigorífico Ecotunja S.A.S.. (Lea: En 14 meses Tunja tendría planta de sacrificio bovino)

Será una transformadora de alta tecnología en cada uno de sus niveles de sus procesos de producción a tal grado que garantizarán la inocuidad requerida tanto por las normas nacionales como en las internacionales.

“De hecho, ha sido clasificada con la categoría de planta nacional por las autoridades sanitarias de orden nacional”, resaltó.

La capacidad

El frigorífico tendrá capacidad para realizar las diversas actividades de una planta con enfoque integral: sacrificio, desposte y maduración. Para este último proceso contará con cuartos fríos en los que podrá procesar las canales de las reses a las temperaturas y por los tiempos que sean necesarios para ofrecer un producto cárnico de gran calidad.

Igualmente podrá realizar cortes con valor agregado y el adecuado empaque al vacío que permitirá la debida conservación de los productos alimenticios.

Ofrecerá dos líneas de negocio: vacunos y porcinos. La primera con capacidad de sacrificio de 400 reses en un turno de 8 horas y la segunda de 200 porcinos. “La perspectiva es avanzar en la escala productiva de tal manera que se logren establecer las 3 jornadas diarias”, explico Contreras.

Inicialmente atenderá el mercado natural cuya demanda se calcula en 300 reses bovinas diarias en la capital del departamento de Boyacá. (Lea: Tunja no tiene planta de sacrificio y la carne que recibe es ilegal.

Desarrollo integral

Según Armando Contreras “el proyecto tendrá una inversión de $60.000 millones que proviene del sector privado en el que participa el Grupo Meyan y otros particulares que igualmente tienen inversiones en otras plantas de sacrificio del país”.

“Hemos sido ganaderos y tenemos bastante conocimiento, además contamos con la asesoría permanente de empresas muy importantes”, aseguró. (Lea: Más apoyo pide única planta de bovinos en Boyacá que cumple decreto 1500)

Al finalizar la construcción e iniciar operaciones el proyecto se convertirá en un complejo integral para la ciudad y el departamento y en un importante generador de empleo que contribuirá favorablemente en el desarrollo y en la economía del departamento de Boyacá.

Traerá consigo una nueva cultura en la comercialización de ganado y modificará la costumbre de los ganaderos de Tunja y del departamento, de negociar sus animales en las plazas de mercado y de manera informal, para concentrar esta actividad en el centro de subasta que hace parte del proyecto de construcción y que se ubicará en el mismo terreno del frigorífico.

Contará asimismo con laboratorio y los respectivos espacios para las oficinas del ICA y del Invima.

Aun sin comenzar la construcción la empresa Frigorífico Ecotunja S.A.S. ha realizado acercamientos comerciales para exportar carne de bovino. “Debemos avanzar para lograr concretarlos, sabemos del potencial de los mercados extranjeros y esperamos lograr posicionarnos en ellos”, aseguró.

El grupo de inversionistas espera terminar el proyecto el año entrante, pero, aunque tiene los permisos y el diseño depende de factores completamente externos que no se pueden medir tales como que se normalice la situación laboral del país y se logre mitigar la pandemia.