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Foto: TvAgro

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Conozca y aplique estrategias para aprovechar el tiempo de mayores nutrientes de las pasturas

Por - 23 de Febrero 2022

El forraje es un elemento clave para suplir los requerimientos nutricionales del ganado y que éste exprese su potencial genético por lo que es importante disponer de un producto de alta calidad.


El forraje es un elemento clave para suplir los requerimientos nutricionales del ganado y que éste exprese su potencial genético por lo que es importante disponer de un producto de alta calidad.

La determinación de la calidad nutricional del forraje es indispensable, teniendo en cuenta que las praderas son un sistema dinámico de crecimiento, que alcanzan un momento determinado, donde expresan la mayor concentración de nutrientes, según lo expuesto por Juan Pablo Osorio Ospina y Ruth Rodríguez Andrade, de la Universidad de La Salle, en un trabajo publicado en la revista Acovez. 

Es por ello que, según plantean los autores, es necesario defoliar la pradera en el momento exacto, puesto que, si cada planta que forma el potrero no se defolia en el momento indicado, empieza a disminuir su valor nutricional lo que representa una pérdida de la calidad nutritiva del alimento que se suministrará a los bovinos. (Lea: Un manejo integrado entre las pasturas y el animal)

En Colombia, señalan, los productores toman la decisión de cómo dar uso a sus pasturas, aplicando diversas teorías, algunas de ellas, corresponden a dejar descansar la pradera un tiempo determinado, realizar rotación de potreros de acuerdo a la disponibilidad de forraje, hacer un pastoreo continuo sin importar la calidad bromatológica del forraje o esperar al nacimiento de la tercera hoja verdadera, entre otros.

En la mayoría de estos métodos se espera un número de días fijo para lograr el rebrote de los pastos, pero cada pradera tiene un periodo de recuperación diferente debido a las condiciones climáticas y la ubicación de la finca; si no se defolia en el momento adecuado, no se aprovecha al máximo el valor nutritivo de cada pasto

Un ejemplo a seguir, de acuerdo con lo expuesto por los autores, es Nueva Zelanda, un país eficiente en la producción agropecuaria, donde los productores utilizan el forraje dentro de los sistemas productivos cuando este tiene las mejores características nutricionales, mediante la implementación del momento óptimo de pastoreo por medio del tiempo térmico expresado como filocrono (grados acumulados por día).

El método de defoliación consiste en usar la temperatura y las condiciones ambientales de precipitación, luminosidad y fertilidad del suelo para predecir el crecimiento de la pradera y la calidad nutricional de la misma.

Se requiere calcular la temperatura media que se refiere al promedio de la temperatura máxima y mínima de cada día y conocer la temperatura base, que es la mínima temperatura en la que la planta realiza procesos de crecimiento para establecer un cálculo de los grados que está acumulando la planta. Dicho cálculo surge de la temperatura media de cada día restado a la temperatura base. Esos grados acumulados en ese día, deberán sumarse a los del día siguiente hasta llegar al número que indica que el pasto está en su mejor momento nutricional, explican los autores. (Lea: Conozca por qué las pasturas adaptadas son la base para una ganadería rentable y competitiva)

La cantidad de grados acumulados está relacionada con la aparición de hojas nuevas y con la velocidad de crecimiento de las plantas, al igual que, puede ser un parámetro para ser implementado como método de pastoreo, se afirma que cada 90 grados acumulados, en el caso del Lolium Perenne, se da el nacimiento de una hoja nueva.

Se sabe que el desarrollo de las plantas y su crecimiento es sensible a la temperatura, razón por la cual el tiempo térmico se puede usar para determinar el crecimiento de cada planta. Es claro que hay una relación entre la luminosidad y la detección térmica debido a que la proteína fitocromo B, que es un fotorreceptor, es dependiente de la temperatura.

Además, el agua, junto con la acumulación de grados de temperatura, están relacionados al crecimiento de la planta y tienen una importancia significativa sobre las tasas de germinación. Igualmente, se ha demostrado que la disponibilidad del agua en el suelo reduce el tiempo térmico para las plantas y estimula el desarrollo de hojas en el tallo principal y en las ramas secundarias.

Otras investigaciones evidencian que existen factores hormonales que se estimulan con la temperatura como es el caso de la auxina, encargada de generar la elongación de la planta, lo que permite deducir que la temperatura tiene un efecto directo sobre el crecimiento de las plantas, por ende, el nivel óptimo para ser consumidas y obtener su máximo potencial alimenticio.

El filocrono como criterio de pastoreo tiene una importancia significativa, pues puede contribuir a lograr una eficiencia sobre el uso de las praderas, determinando el momento adecuado de cosecha para lograr una producción adecuada de biomasa, con una calidad nutricional optima que ayudará a cumplir con los requerimientos nutricionales del animal, eliminando o disminuyendo la utilización de alimentos balanceados concentrados. (Lea: 16 gramíneas para ganado que habita en clima cálido)

Por todo ello, señalan, esta es una herramienta útil para las ganaderías, puesto que, al predecir el crecimiento de las plantas con esta metodología se abre un abanico de posibilidades en cuanto a la optimización de los costos de producción por medio de la utilización del forraje.    

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