¿Cómo se calculan los valores de cría estimados (EBVs)?

El valor genético de un animal se puede definir como su mérito genético para cada rasgo. Si bien no es posible determinar el verdadero valor de cría de un animal, es posible estimarlo. Estas estimaciones del valor de cría se denominan valores de cría estimados (EBVs).

El estimado del mérito genético de un animal es la contribución genética (aditiva) al rendimiento observado de un animal. Se reporta en términos de desviación absoluta con respecto al EBV promedio de un grupo de referencia o base genética.

Por ejemplo, un EBV = +700 L para una vaca significa que bajo condiciones idénticas de manejo, cuando esta vaca esté en edad madura, se espera que produzca 700 L más que el promedio del grupo de vacas utilizado como referencia o base genética.

Según un documento sobre preguntas frecuentes de la EBV, elaborado por los doctores Newton, Bielek y Morgan, los EBV se expresan como la diferencia entre la genética de un animal individual y la base genética con la que se compara el animal.

De acuerdo con los autores del texto, los EBV se informan en las unidades en las que se toman las medidas (por ejemplo, kilogramos para los EBV de peso). (Lea: Avances genéticos ayudan a la eficiencia y rentabilidad de los hatos lecheros)

Por lo tanto, un valor de +20 kg para peso a 400 días significa que el animal es genéticamente superior en 20 kg a 400 días en comparación con la base genética de la población de ganado. En promedio, la mitad de esta diferencia se transmitirá a la descendencia del animal.

Los datos se introducen en una base de datos. La producción real se ajusta primero por factores no genéticos conocidos como la edad de la madre, el tipo de nacimiento y crianza y la edad para eliminar los efectos ambientales sobre el rendimiento.

El rendimiento para cada animal se compara luego con la producción media de un grupo de animales contemporáneos. Luego, se combina el registro de rendimiento del animal con los de todos sus parientes y se pondera la información del pariente en proporción a qué tan cerca están.

Una vez más, todos los registros se expresan en relación con sus grupos contemporáneos para eliminar diferencias no genéticas (entre años, manadas, etc.) en el rendimiento promedio. (Lea: La importancia del valor genético de la cría y criterios para mantenerlo)

Finalmente, los números se ajustan según la heredabilidad de cada rasgo y el número de registros disponibles. El EBV resultante es la mejor estimación del verdadero mérito genético de cualquier animal individual para cualquier rasgo genético específico medido.

Si bien las matemáticas del cálculo de EBV son complejas, el resultado es un reflejo directo del desempeño real del individuo y sus familiares, expresado en relación con sus contemporáneos. (Lea: La importancia del toro puro en el mejoramiento genético de la cría)

¿Qué rasgos de EBV son más importantes?

Depende de los objetivos de la ganadería y del mercado. Los EBV son herramientas y se pueden ajustar para adaptarse a su sistema de producción. Si su objetivo es comercializar animales alimentados con pasto, entonces los EBV en rendimiento con pasto son más importantes.

Si las crías son el principal producto que demanda el mercado en su región, los EBV de animales que se destacan a edad temprana deben ser privilegiados. Sin embargo, si el mercado recompensa a los novillos de mayor peso, estos EBV son más importantes.

¿Qué es un EBV “bueno”?

Un EBV “bueno” difiere entre rebaños y sistemas de manejo dependiendo de sus necesidades. La mayoría de los EBV se expresan en las mismas unidades que el rasgo que se está medidos, pero ocasionalmente se expresan como un porcentaje de la media del rasgo.

En general la mayoría los criadores seleccionarán los EBV de valor positivo. La principal excepción a esta regla es el rasgo de resistencia del parásito (EBV conteo de huevos en heces).

Un EBV negativo indica que el animal tendrá un recuento de huevos fecales más bajo en comparación con el promedio de la raza y, por lo tanto, más resistencia a los parásitos. (Lea: ¿En qué consiste el valor de cría estimado?)

Se recomienda para la mayoría de las razas que la selección se equilibre entre ambos crecimiento y características maternales para asegurar que los corderos vivos con pesos aceptables estén disponibles para mercado.

Tenga cuidado con los EBV extremos. La búsqueda del animal de más rápido crecimiento o el más prolífico a menudo implica el sacrificio de otros rasgos importantes necesarios para el beneficio y/o la productividad.

Además, los animales con EBV extremos pueden ser menos eficientes y equilibrados. Sin embargo, no todos los rasgos se ven afectados en el mismo grado por la selección de los extremos.